El Partido Justicialista (PJ) de Corrientes oficializó su fórmula electoral de cara a las elecciones provinciales, en una jugada que busca reposicionarse como alternativa frente al oficialismo radical que gobierna la provincia desde hace más de dos décadas. Según publicó Ámbito Financiero, la fórmula será encabezada por dirigentes de peso en la política local y se completa con referentes del sindicalismo y del movimiento cooperativista.
El intendente de Paso de los Libres (tercera ciudad más poblada de la provincia), Martín “Tincho” Ascúa, será quien compita para gobernador correntino, luego de que Cristina Kirchner lo avale en su última aparición pública fuera de la ciudad de Buenos Aires. Por la noche del sábado, se determinó que el diputado provincial César Lezcano, presidente del Frente Renovador local, sea el candidato a vicegobernador.
El anuncio fue realizado en un acto partidario que reunió a la mayoría de los intendentes justicialistas del interior, así como a legisladores y dirigentes de la capital provincial. La estrategia del peronismo apunta a consolidar una propuesta de unidad, que logre sumar a sectores independientes y a parte del electorado desencantado con la gestión de Gustavo Valdés y sus aliados.
La fórmula será liderada por un dirigente con trayectoria en la gestión pública y alta visibilidad mediática, acompañado por una referente del movimiento social con base territorial en barrios populares. La combinación busca representar tanto al peronismo tradicional como a las nuevas expresiones del campo popular.
El mensaje central de la campaña será la necesidad de recuperar el equilibrio en la administración provincial, mejorar la distribución de los recursos y garantizar una mayor presencia del Estado en áreas críticas como salud, educación y empleo joven. La oposición también cuestiona el endeudamiento en dólares asumido por la provincia y el destino de obras públicas licitadas y no ejecutadas.
El PJ correntino intentará revertir una tendencia adversa: desde 2001, no logra recuperar el gobierno provincial. Para eso, además de la fórmula, apuesta a renovar el discurso, sumar figuras extrapartidarias y fortalecer la fiscalización en los circuitos rurales donde tradicionalmente tiene menor penetración.
La elección en Corrientes será observada a nivel nacional como un termómetro del reordenamiento opositor, en un escenario donde el peronismo busca reconstruirse tras la derrota presidencial y en medio del avance libertario. En ese sentido, la elección correntina puede anticipar estrategias para otras provincias y municipios en disputa.